
f l a m e n c o

domingo, 22 de febrero de 2015
Los conciertos de “Flamenquería”
Ayer visitamos “Flamenquería”, en la trianera calle Castilla y en la mismita orilla del Guadalquivir —desde sus ventanales se contempla Sevilla, al otro lado del río—, otro de los locales que conforman el circuito alternativo del flamenco sevillano.
Cada sábado, dentro del ciclo “Promesas del Flamenco”, ofrece a los jóvenes que buscan romper el anonimato y abrirse camino en el mundo de la profesionalidad la oportunidad de subir a un escenario y mostrar a un público todo lo que llevan dentro.
Anoche tuvimos la suerte de que en el cartel estuvieran Eliza “La Morá”, Diaa Eddin, Paz de Manuel y Alberto López. Los cuatro tuvieron además su noche. Estuvieron sobrados de arte y de ganas de disfrutar y hacer disfrutar a los que nos congregamos allí para verlos.
Abrió el recital Alberto por alegrías, demostrando, como siempre hace, lo magnífico guitarrista que ya es. Eliza fue todo elegancia, delicadeza y femineidad en unos tientos-tangos. Paz conjugó sensibilidad y conocimiento por granaínas. Y Diaa cerró el concierto poniéndole, garra, temperamento y riqueza de pies a la bulería por soleá. Fue una noche completa. ¡Enhorabuena a los cuatro!
José Luis Navarro
artículo original:
http://elecodelamemoria.blogspot.com.es/2015/02/los-conciertos-de-flamenqueria.html

martes, 16 de septiembre de 2014
Eliza la Morá, imaginación y valentía
Anoche volvimos a la Caja Negra, un local que continúa ofreciendo su pequeño tablao a jóvenes que quieren ser alguien en el mundo del flamenco. Había bastantes guiris. Parecen que tiene un olfato especial para encontrar lo mejor de lo que los ingleses llaman "Flamenco fringe". Bailaba Eliza la Morá con el cante de Paz de Manuel, la guitarra de Alberto López y las palmas de Diaa Eddin.
Eliza no es, ni mucho menos, una bailaora corriente. Es valiente, tiene imaginación y arte. Hizo dos estilos muy poco usuales. Dos bailes de los que no se suelen enseñar en las academias: la petenera y una zambra rematada por tangos. Y les puso imaginación, originalidad y buen gusto. Llenó el escenario de imágenes rebosantes de plasticidad y belleza. La petenera, además, la completó con una escobilla acoplada a su música, hecha con limpieza y precisión.
Desde luego, nos alegra ver como estas jóvenes no paran de mejorar y enriquecer sus bailes. ¡Enhorabuena y sigue así, Eliza!
José Luis Navarro
artículo original:
http://elecodelamemoria.blogspot.com.es/2014/09/eliza-la-mora-imaginacion-y-valentia.html?spref=fb

martes, 28 de enero de 2014
Esta semana en La Caja Negra
El lunes coparon las tablas de La Caja Negra dos polacas: Aniela la Galleta y Eliza la Morá.
Aniela, con una insólita indumentaria (un vestidito blanco de batista y unos recatados pololos), disfrutó y nos hizo disfrutar con una guajira a su aire. Eliza la Morá (antes Miscior) volvió a cautivarnos por alegrías. Estuvo sobrada de imaginación y arte. Da gusto ver los progresos que hacen mes a mes estas jóvenes bailaoras. Atrás estuvieron Rocío la Boterita, espléndida por soléa, y la guitarra de Vajan.
(...) Sería menester que las autoridades que todos sufrimos se ocupasen al menos algo de estos jóvenes que son sin duda el mañana de nuestro arte.
Jose Luis Navarro
artículo original:
http://elecodelamemoria.blogspot.com.es/2014/01/esta-semana-en-la-caja-negra.html

martes, 7 de mayo de 2013
Nos queda el cante
A pocos les pueden caber dudas de que el Flamenco es un arte universal. Porque despierta el interés y alimenta el gozo en los cinco continentes de este planeta y porque tiene intérpretes nacidos en cada uno de ellos. En Sevilla, cuna de su aprendizaje formal, surgen un día y el siguiente jóvenes artistas de las más variadas nacionalidades. De momento, se salva el cante de esta invasión artística. Desde luego, la lengua parece una barrera infranqueable. Todavía no se comprende una seguiriya con acento del Bronx, pero todo terminará andándose.
Viene todo esto a cuento de la actuación anoche en La Caja Negra de Eliza Miscior, polaca, Diaa Eddin, sirio, y Kentaro y Kojiro, orientales. El cante lo puso Paco Borrego Díaz, cordobés. Iban a taquilla y llenaron el local. Eliza y Diaa no solo están sobrados de arte, sino que tienen poder de convocatoria. (...)
El concierto lo abrió Paco Borrego con un cuplé por bulerías. Nos gustó. Tiene una voz muy flamenca y sabe lo que hace con ella. Después se presentaron Eliza y Diaa. Ella hizo una preciosa guajira adornándose con un pericón y con Diaa de palmero. Se le nota, para bien, la huella de Milagros Menjíbar. Luego, intercambiaron los papeles, ella se puso atrás y Diaa remató el baile por soleá ―magnífica la soleá antigua de Triana que le cantó Paco Borrego―.
La segunda parte la abrieron Kentaro y Kojiro por rumbas. Eliza y Diaa salieron juntos y bailaron juntos. Hicieron un taranto perfectamente sincronizado, rebosante de imaginación y originalidad. Con él, terminaron de cautivar a un público que hacía ya tiempo que estaba entregado a su arte. ¡Enhorabuena a todos!
Pero ahí no acabó todo. Sin anuncio previo, se presentó Raimundo Amador y se puso a tocar con los suyos. Presenciar estas reuniones artísticas espontáneas es todo un lujo que, como la lotería, algunas veces toca en La Caja Negra.
José Luis Navarro
artículo original:
http://elecodelamemoria.blogspot.com.es/2013/05/nos-queda-el-cante.html